No cabe que duda las mujeres han tomado el control del país y del mundo, por que en esta ocasión, unas "princesas" de Polanco decidieron defenderse a capa y palabras de la policía, que según ellas eran objeto de extorsión.... ¡¡¡Mujeres!!! Dios nos ampare...
En momentos en que la situación que atraviesa el país, en temas de seguridad, es muy delicada, comienza a circular en el canal de videos por internet You Tube, una grabación que dice mucho del nivel de violencia al que los ciudadanos han llegado.
En las imágenes se puede apreciar a un par de mujeres que son detenidas supuestamente por negarse a hacerse la prueba del Alcoholímetro en calles de la colonia Polanco en la Ciudad de México, quienes empujan e insultan a un policía de la Secretaría de Seguridad pública capitalina, quien no atina qué hacer.
Con una violencia verbal exagerada, las damas alardean que no les pueden hacer nada al tiempo que a uno de los uniformados lo humillan por su condición de "asalariado".
Hay que mencionar que la zona de Polanco es una de las de mayor nivel socioeconómico en la capital del país y en la que ocasionalmente se instalan estos operativos, para evitar que la gente que acude a divertirse a bares de la zona, maneje en condiciones impropias.
En el tiempo que dura el video, las mujeres acusan al policía de ser agresivo, sin embargo, queda más en evidencia su falta de capacidad para controlar la situación, que su supuesta agresividad.
Quienes grabaron el video también aseguran que posteriormente, se volvieron a bajar de su camioneta para amenazar a los policías y patear la patrulla de estos, para después volver a emprender su camino casi atropellando a un peatón.
La situación que se puede observar es de extrema tensión por que a ambas partes se les salió de control el caso, haciéndose evidente el hartazgo y desconfianza que se tiene hacia los cuerpos de seguridad, quienes hoy más que nunca se encuentran tan devaluados.
Y de igual manera, si algo hay que decir en favor del uniformado, es la prepotencia de algunos que olvidan la educación más elemental, ufanándose de su condición social.
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