En el próximo mes, las tiendas relacionadas con la venta de productos de belleza tendrán un lleno total tanto de hombres como mujeres, porque se estará vendiendo una píldora que reduce las arrugas en un 30% y está avalado por la revista New Scientist, ojo no es un producto de genoma por lo tanto si sirve.
Su lanzamiento está previsto para el mes de octubre en 44 spas de Gran Bretaña, España y Canadá. Promete ser una revolución en el mercado de los productos de belleza, ya que sería el primer tratamiento antiarrugas que muestre evidencia de combatirlas desde las capas más profundas de la piel.
Se trata de una cápsula que contiene vitaminas C y E, isoflavonas de soja, licopeno de tomates y ácidos poliinsaturados omega-3 de aceite de pescado, productos que activarían genes involucrados en la síntesis de colágeno.
El tratamiento fue desarrollado por John Casey y su equipo de los laboratorios Unilever, en Sharnbrook, Gran Bretaña. Las cápsulas no serán las primeras en recibir respaldo científico, pues algunas cremas también demostraron el mismo poder, según publicaciones de prestigiosas revistas científicas.
La revista New Scientist contactó a investigadores para estudiar esta nueva píldora. Según la publicación, los resultados de las pruebas muestran que en 14 semanas, las patas de gallo habían disminuido su profundidad desde un 10 hasta un 30 por ciento.
Gail Jenkins, integrante del equipo de científicos, recomienda tomar tres píldoras diarias durante al menos tres meses, un tiempo breve en el que parece poco probable que se presenten efectos adversos. Suspendido el tratamiento, el envejecimiento normal seguramente volverá a profundizar las arrugas.
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